Ibiza, también conocida como la isla blanca, es un auténtico paraíso en el Mediterráneo. 

Es famosa por sus playas de aguas turquesa, que van desde las más concurridas y festivas hasta las más apartadas y tranquilas. 

En este artículo, recorreremos las diez playas con las aguas más turquesas de Ibiza, destacando sus características distintivas.

Es importante que tengas en cuenta que, a pesar de sus espectaculares aguas y playas, es posible que por momentos no se vean tan espectaculares como esas fotos que has visto en Instagram.

Más adelante te explico el por qué y cuando puedes apreciarlas en su máximo esplendor. 

1) Cala Salada

Sin lugar a dudas, Cala Salada encabeza nuestra lista gracias a sus aguas azul turquesa y cristalinas por excelencia. 

Es una playa de arena rodeada de bosques de pinos que le otorgan una belleza natural incomparable. 

Dispone de un pequeño bar, pero no de un gran aparcamiento, por lo que se recomienda llegar temprano en temporada alta.

De todas formas si no logras encontrar parking hay un servicio de parking y buses en la carretera.

Allí podrás dejar tu coche y un bus que pasa con cierta frecuencia en temporada alta te dejará en la playa. 

Suele llenarse mucho en verano, un aspecto a tener en cuenta si lo que quieres es más armonía.

2) Cala Conta

Esta playa también es conocida por sus impresionantes vistas al mar y sus aguas increíblemente turquesas. 

Cuenta con restaurantes, parking amplio y un ambiente familiar muy agradable. Es una playa de arena y rocas.

En temporada suele estar muy concurrida por lo que es recomendable ir temprano y tener cuidado de no dejar pertenencias en los autos ya que suele haber oportunistas merodeando por la zona. 

3) Cala d'Hort

Cala d'Hort es una pequeña playa, única por sus impresionantes vistas a Es Vedrà. Pero no sólo ese es su encanto sino que sus aguas también pueden mostrar los colores más transparentes que puedas imaginar.

En la cala encontrarás restaurantes que preparan una paella inolvidable y un pequeño parking, por lo que es también es recomendable llegar temprano.

4) Cala Tarida

Cala Tarida es una playa de arena con aguas cristalinas, perfecta para familias. Cuenta con todos los servicios, incluyendo restaurantes, bares, supermercados y parking.

Resulta muy cómoda para pasar el día y disfrutar de su impresionante entorno y belleza. 

5) Playa de Las Salinas

Esta es una de las playas más famosas de Ibiza. Razón por la cual siempre suele estar animada y llena de gente.

Pero gracias a que es una playa larga siempre encontrarás un lugar para echarte en la arena. 

Sus aguas turquesa y su larga extensión de arena dorada atraen a una multitud diversa, desde famosos hasta familias.

Cuenta con varios bares y restaurantes, además de parking. Éste último de pago.

Y si lo prefieres puedes seguir caminando, pasando el último chiringuito, Sa Trinxa, y te encontrarás unas pequeñas calitas que suelen estar menos concurridas y que tienen una increíble belleza. 

Y si aún no estás conforme con todo lo que has visto, puedes adentrarte en el bosque hasta encontrar laTorre de Ses Portes y cruzarte a Es Cavallet, la playa vecina que es igual de bella y tiene, en ocasiones, el agua aún más turquesa que su vecina.

6) Cala Vadella

Esta cala de arena blanca y aguas turquesa está resguardada entre colinas cubiertas de pinos, lo que la convierte en un lugar perfecto para relajarse. No bien llegas desde la carretera ya puedes apreciar el espectáculo desde lo alto, una bahía color turquesa intenso. 

Ofrece todos los servicios necesarios, incluyendo restaurantes, bares y un amplio parking que se encuentra arriba en la colina. Sólo tendrás que subir un poco al tener que regresar. Pero después de tanto relax en la playa, seguramente no tendrás ningún problema en hacerlo. 

7) Playa de Ses Illetes

Si de turquesa hablamos, no hay nada como las playas de Formentera para encontrar el turquesa perfecto. 

La playa Calo d’ Mort situada en la pequeña isla de Formentera, se puede visitar en un viaje de un día desde Ibiza. 

Sus aguas de turquesa intenso y arena blanca la convierten en una visita obligada. Se trata además de una cañita pequeña con acceso difícil ya que requiere bajar una precaria escalera, por lo que no la recomendamos para personas mayores. 

Hay también muchas más playas y calas en Formentera de aguas tuquesas como Cala Saona, Playa Llevant, Playa Migjorn, Es Pujols o Sea Canyes. 

Cualquiera que decidas visitar en Formentera, puedes estar seguro que no te defraudará.

8) Playa d'en Bossa 

Playa d'en Bossa es la playa más larga de Ibiza, también tiene aguas turquesa pero al ser más céntrica hay épocas en las que está más turbia.

De todas maneras amerita una visita para vivir su vibrante ambiente festivo.

Tiene de muchos restaurantes, bares y tiendas a lo largo del paseo marítimo, y cuenta con un amplio parking.

Así que es muy cómoda si quieres ir a una playa cercana a la ciudad y que ofrezca todos los servicios. 

9) Cala Xarraca

Esta pequeña cala es famosa por sus aguas turquesa y su tranquilidad. 

Es una playa de arena y piedras, con pocos servicios, aunque tiene un pequeño restaurante.

Y aunque suele estar muy concurrida en verano puedes ir caminando a lo largo de su costa subiendo algunas rocas para encontrar pequeñas calas y el famoso columpio donde muchos se toman “la foto perfecta de ibiza”.

10) Cala Llenya

Finalmente, Cala Llenya es otra de nuestras playas favoritas de arena con aguas cristalinas, rodeada de mucha naturaleza.

Ofrece un ambiente tranquilo y familiar, con un restaurante y un parking bastante decente.

Como habrás podido comprobar, Ibiza es el lugar perfecto para los amantes de las playas y el mar azul turquesa.

Ya sea que prefieras una playa llena de vida y servicios, o una cala tranquila y apartada, en esta isla encontrarás tu rincón ideal para disfrutar del sol y del mar. 

Así que prepara tu protector solar, tu toalla y tu equipo de snorkel, y ven a explorar las maravillosas playas de Ibiza. ¡Te esperamos!

¿En qué época del año se ven más turquesas las aguas en ibiza?

Las aguas de Ibiza son famosas por su característico color turquesa durante todo el año, gracias a su clima mediterráneo que proporciona una abundante cantidad de luz solar y a la valiosa posidonia que da ese característico color al mar. 

Sin embargo, hay otros dos factores principales que pueden realzar este atractivo tono: la luminosidad del sol y la tranquilidad de las aguas.

Durante los meses de verano, de junio a septiembre, Ibiza disfruta de días largos y soleados, lo que aporta una luminosidad intensa que puede realzar el color turquesa del agua. 

Pero en oposición a este factor, justamente son estos meses los más concurridos en términos de turismo y eso puede hacer que las aguas estén más agitadas y, por ende, algo menos cristalinas.

Otro factor que incide en la turbulencia de las aguas es cuán cercanas están a los centros urbanos, por lo que calas más apartadas son en general más cristalinas. 

Por otro lado, en los meses de primavera (marzo a mayo) y otoño (octubre y noviembre), aunque los días son algo más cortos y la luz del sol puede ser menos intensa, las playas suelen estar más tranquilas. 

La reducción del tráfico de embarcaciones y de bañistas en el agua puede permitir que el mar esté más calmado, lo que puede resultar en un color turquesa más intenso y cristalino.

Por tanto, si tu principal objetivo es disfrutar de las aguas más turquesas, te recomendaría visitar Ibiza durante la primavera tardía o el otoño temprano.